El torero madrileño ha abierto la puerta grande del coso de la calle Alcalá por segunda vez consecutiva, cuajando a un noble y enclasado ejemplar de Juan Pedro Domecq
Reseña
Plaza de Toros de Las Ventas de Madrid. Corrida extraordinaria de la Beneficencia. Casi tres cuartos de aforo cubierto. Astados de Daniel Ruiz (1º y 3º), Juan Pedro Domecq (2º, 4º y 6º) y Victoriano del Río (5º). Los mejores el 1º, de Daniel Ruiz, con gran calidad, y, sobre todo, el 6º, de Juan Pedro Domecq, con mucha clase y recorrido en su embestida.
Sebastián Castella (Azul marino y oro): Saludos tras aviso y Vuelta al ruedo tras petición y aviso.
Emilio de Justo (Malva y oro): Silencio y Silencio tras aviso.
Fernando Adrián (Nazareno y oro): Silencio y 2 orejas.
Templado Sebastián Castella con el buen primero de Daniel Ruiz
Muy entregado ha estado toda la tarde Sebastián Castella, tanto que ha cobrado una fuerte voltereta al instrumentar un quite por saltilleras al primero de la función. Extraordinario inicio de faena del diestro francés, con dos pases cambiados por la espalda, rematando el conjunto con uno del desprecio, de cartel. Muy despacio lo ha toreado Castella, aprovechando la calidad y el ritmo con el que embestía su antagonista, que tenía el defecto de puntear el engaño al final del viaje. Más profundidad han tenido las últimas series, ligando los muletazos y apretando más al toro del hierro albaceteño. Pinchazo y estocada. Saludos tras aviso.
Buenos pasajes en el trasteo de Emilio de Justo al segundo de la tarde
Emilio de Justo ha saludado al primero de su lote con una larga cambiada de rodillas, continuando después con un buen ramillete de verónicas. El viento le ha molestado mucho al torero extremeño a la hora de manejar la pañosa, con un toro cambiante, ya que unas veces se desplazaba hasta el final pero otras, sobre todo al obligarlo e intentar buscar la ligazón , protestaba. De uno en uno ha firmado Emilio de Justo pasajes de interés en su faena, culminado su labor de una estocada contraria. Silencio.
Voluntad de Fernando Adrián con el protestado tercero
El tercero ha sido un toro muy protestado por el público desde la salida al ruedo, primero por su más que justa presencia para la Plaza de Las Ventas, y segundo por su falta de fuerzas. Entre pitos constantes del respetable y abucheos se ha desarrollado la lidia. Entre tanto, Fernando Adrián ha puesto mucha voluntad y entrega pero con un oponente así no cabía mayor lucimiento. Hay que decir que resultó volteado, sin consecuencias, al empezar su faena de muleta con un pase cambiado por la espalda. Espadazo trasero y tendido y descabello. Silencio
Muy por encima Sebastián Castella del cuarto, un toro que ha sacado fondo de casta en el último tercio
El cuarto no ha hecho albergar muchas esperanzas en los primeros tercios, ya que ha salido suelto del peto, demostrando muy poca fijeza y entrega. Pero el inicio de faena por bajo de Sebastián Castella, pudiendo al animal, y quedándose enseguida con su embestida, han contribuido a que el toro rompiera delante. Cornúpeta exigente, nada sencillo, con motor y transmisión a los tendidos. Muy por encima Castella, que no se ha aburrido, hilvanando con paciencia un trasteo en el que ha sabido solventar las complicaciones, derivadas de la casta, que presentaba el toro. Gran estocada. Vuelta al ruedo tras petición y aviso.
Momentos notables de Emilio de Justo con el exigente quinto
Variado y garboso ha sido el recibo capotero de Emilio de Justo al quinto, saliéndose hacia los medios con el de Victoriano del Río. El astado de la vacada madrileña ha tenido movilidad, transmisión, exigente para el que estaba delante. Emilio de Justo ha firmado momentos buenos por ambos pitones pero al conjunto le ha faltado mayor redondez. Pinchazo, estocada trasera y descabello. Silencio tras aviso.
Faena rotunda de Fernando Adrián al noble y enclasado sexto, de Juan Pedro Domecq
Desde que ha pisado el ruedo del coso venteño, el sexto animal de la tarde ha acudido con nobleza, fijeza y prontitud al que lo llamaba. Con alegría también ha acudido al caballo de picar. Fernando Adrián ha iniciado su faena con dos pases cambiados por la espalda, para echarse seguidamente la muleta a la mano izquierda. Entrega, clase y temple del astado de Juan Pedro Domecq, y faena rotunda, maciza del diestro madrileño, que ha estado a la altura de un toro que de tandas virtudes como atesoraba no era sencillo. Muy ligado y relajado lo ha toreado Fernando Adrián, degustando la embestida de su antagonista, olvidándose un poco de la técnica y sintiendo todo lo que hacía. Así han llegado instantes de gran belleza, como un par de naturales que han durado una enormidad, muy largos y lentos. Espadazo arriba. Dos orejas.
Incidencias
La Corrida de la Beneficencia ha sido presidida por su Majestad El Rey, Felipe VI, quién ha estado acompañado por la Presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, y el Maestro Luis Francisco Esplá. Al Rey han brindado sus primeros toros los tres matadores.
Al finalizar el paseíllo se ha guardado un minuto de silencio en recuerdo del Maestro Iván Fandiño, al cumplirse hoy seis años de su fallecimiento
Entre las cuadrillas hay que subrayar a José Chacón, tanto en la lidia del primero como al parear al cuarto, en el que se ha desmonterado, y a Marcos Prieto, que se ha lucido con los palitroques en el sexto, saludando una ovación.
Galería de fotos de la Corrida de la Beneficencia
Fotos: Prensa Plaza 1