La Asociación El Toro de Madrid celebró anoche la tercera de sus tertulias invernales, en la que fue protagonista el ganadero de Toros de Brazuelas, Jesús Pérez Carbonero.
El joven criador vallisoletano explicó con detalle los orígenes de la divisa, formada en el año 2013 con reses de El Montecillo y La Palmosilla, incrementándose posteriormente con otras de Lola del Yerro. Recientemente han añadido animales de Luis Algarra, El Vellosino, Daniel Ruiz y otros de procedencia Garcigrande, sumando un total de 140 vacas.
Toros de Brazuelas tomó antigüedad en la Plaza de Las Ventas el pasado 28 de Julio con una novillada que pasó con nota alta tan exigente prueba. Hasta tres astados destacaron del sexteto, paseando una oreja Jordi Pérez «El Niño de las Monjas» y dando una vuelta al ruedo Juan Pedro García «Calerito».
Según afirmó el ganadero, para ellos lo primero que debe tener cualquier encierro que va a lidiarse ante un público es una presentación acorde con la plaza de destino. En cuanto a las cualidades que en su casa son primordiales a la hora de la selección son la bravura, la transmisión, el motor y la humillación. Los diferentes animales que conforman la ganadería de Toros de Brazuelas se encuentran distribuidos en dos fincas muy distintas entre sí, una de clima más bonancible en Moraleja (Cáceres) y otra en Valladolid, donde las temperaturas son mucho más bajas en invierno, contribuyendo ello, en palabras de Jesús Pérez Carbonero, a que las reses sean más duras y sufridoras. Actualmente los pelajes principales en la ganadería son los castaños y los negros.
Imagen: Asociación El Toro de Madrid