La muestra se clausuró el domingo con un espectáculo de flamenco de la compañía de Danza que dirige la reconocida bailarina Nieves Jiménez
El pintor madrileño Emilio Fernández-Galiano clausuró el domingo su exposición de pintura taurina poniendo el broche de oro a la Feria de San Isidro en la Plaza de Toros de Las Ventas mediante un espectáculo de baile flamenco interpretado por la Compañía de Danza Nieves Jiménez.
En este sentido, la Sala Antoñete acogió del 29 de mayo al 5 de junio, grandes obras dedicadas a maestros como José María Manzanares, Morante de la Puebla, José Miguel Arroyo “Joselito” o Julián López “El Juli”. Sus retratos han formado parte de esta colección de estilo costumbrista y neorrealista, donde la luz y el color son dos elementos claves de Galiano para transmitir movimiento y realismo a sus obras.
“Ha sido una experiencia inolvidable en un sitio único, en el que he podido reflejar mediante la pintura y el arte mi pasión por el mundo del toro que principalmente, se lo debo a mi abuelo Pascual. Emocionante también, dedicarle la muestra a mi amigo y magnífico aficionado José Manuel Sanz Altozano, siempre con nosotros. Y por todo ello, estoy muy ilusionado de volver el próximo año con una muestra muy especial”, declaró Emilio Fernández-Galiano.
Asimismo, la exposición fue clausurada con la magnífica actuación de flamenco interpretada por la Compañía de Danza Nieves Jiménez, dirigida por la reconocida profesional Nieves Jiménez, y formada por un grupo de bailarinas que arrancaron con un baile dedicado a la Semana Santa que simulaba el recorrido de un paso con la Saeta de India Martínez de fondo, seguida de unas sevillanas con palillos dedicadas a Madrid y tituladas “Al viejo Madrid”. Y, terminaron con “Alegrías”, uno de los pasos más relevantes del flamenco con su escobilla y remate por Bulerías.
La exposición “Por la Puerta Grande” ha formado parte de los actos organizados por el Centro de Asuntos Taurinos de la Comunidad de Madrid, en los que pretende que los aficionados del mundo del toro y el arte se enriquezcan con esta fusión en la que el toreo no se entiende sin la Cultura.
Sobre el artista y su obra
Emilio Fernández-Galiano, pintor madrileño y seguntino de corazón, muy vinculado desde su nacimiento a la noble ciudad de Sigüenza. Desde sus orígenes comienza a desarrollarse en la técnica del dibujo, realiza encargos para entidades públicas y privadas, principalmente ilustrando carteles. Sus estudios los realiza en diferentes escuelas privadas de Madrid, compaginándolos con los de Derecho, licenciándose por la Universidad Complutense y colegiándose como Abogado en el Real e Ilustre Colegio de Zaragoza a principios de los noventa.
Pero su gran vocación artística y autodidacta es la que le ha hecho evolucionar desde el dibujo para ilustración de prensa y diferentes medios de comunicación, hasta su actual línea centrada en la figuración y en el paisaje urbano en óleo sobre lienzo, con nuevos motivos que le inspiran constantemente y con los cuales va desarrollando un estilo propio que nos sorprende y cautiva por la fuerza de las figuras que representa y por su visión del alma que las ocupa. Sus obras se dividen en: figuración, luces, paisajes, urbanos, tauromaquia o dibujos.
Obras que tienen un sello propio, aunque conjuguen una auténtica versatilidad de estilos que van desde el realismo contemporáneo, a través de la inspiración del maestro Antonio Lopez; genio al que Fernández-Galiano admira, a pinceladas que captan la luz, el aire libre, lo momentáneo y reflejan su pasión por los artistas impresionistas. Además, la fuerza que trasmiten sus personajes es arte en estado puro. Arte que habla y emociona, pero también arte espontáneo que nace de una intuición creativa del artista.
En la actualidad concilia su producción artística con colaboraciones e ilustraciones y artículos en distintos medios de comunicación. Asimismo, ha expuesto en varias ciudades de España, Bélgica y Holanda.
Fernández-Galiano es miembro de la Asociación Española de Pintores y Escultores, siendo su delegado en la provincia de Guadalajara.
Pilar Cerezo