La vinculación entre el mundo del toro y el de las hermandades y cofradías ha tenido siempre gran relevancia a lo largo de la historia, conociéndose casos de grandes figuras del toreo que han profesado gran devoción a las imágenes titulares de su hermandad, participando en su procesión o estación de penitencia e incluso ocupando cargos dentro de la Junta de Gobierno de la Cofradía respectiva.
Esa conexión existente entre los toreros y la religiosidad popular se pudo ver en la noche de ayer en Sevilla, cuándo el capataz del paso de Nuestro Padre Jesús de las Penas, de la Hermandad de la Estrella, Manolo Vizcaya, le dedicó una levantá al diestro Juan Ortega, trianero al igual que la mencionada Cofradía, quién se encontraba delante de la imagen que esculpiera José de Arce en el siglo XVII.
Imagen: Peña Taurina Trianera Juan Ortega